UNA VOZ SILENCIOSA (Koe no katachi, 2016)
Vamos a ver... después de Your Name (Kimi no Na wa, 2016), un peliculón se mire por donde se mire, siempre se buscan referencias en listas tipo "películas similares", "mejores anime modernos" etc., y se agradece el esfuerzo, pero hay que tener mucho cuidado con este tipo de relaciones.
Una voz silenciosa es una película muy buena, estoy de acuerdo, al nivel de Your Name o de clásicos de Ghibli con los que comparte lista, pero es muy, MUY dura. Ya de por sí el cine de animación japonés suele ser más duro y pesimista que "la media", pero en este caso alcanza cotas muy elevadas.
Vamos con algo de destripe, no sigas leyendo si planeas verla o no te gusta ver películas sabiendo detalles del argumento y de su desarrollo.
El argumento gira (aparentemente) en torno al acoso escolar. Ishida es el típico niñato abusón y popular , y se ceba sobremanera con Ishimiya, una chica sordomuda que llega al instituto, hasta que se le va la pinza de tal forma que acaba consiguiendo que lo abandone. Al cabo de unos años, Ishida se da cuenta de lo bacín que era y se arrepiente, y aquí es donde empiezas a darte cuenta de que en realidad la película no va realmente de bullying, sino de algo mucho más jodido, del suicidio.
Sin entrar en mucho más detalle, la película se vuelve oscura y angustiosa, hasta el punto de preguntarte qué necesidad tienes de estar amargándote la vida viendo estas cosas. Por fortuna (aunque no las tenía todas conmigo), hay final feliz, pero el trago que hay que pasar es muy, muy amargo. En fin, hay gente a la que le encantan estas cosas, a mí desde luego no, y sin dejar de ser una gran película (ahora vamos con eso), no es Your Name, ni Suzume ni Mi vecino Totoro.
Dejando aparte el leit-motiv de la historia y su siniestro desarrollo, poco malo se puede decir de Una voz silenciosa. El cine japonés en general, y el manga en particular, tiene una cualidad muy interesante para mí, que es que cuentan las historias de una forma muy diferente al resto de culturas. Es una sucesión de momentos, pequeñas historias deslabazadas pero entrelazadas que conforman un todo, cuando acaba la película te has hecho tu propia construcción mental de toda la historia, es algo extraño pero que, al menos en mi caso, funciona y además es bastante satisfactorio.
En esta ocasión, además, hay que añadir los extrañísimos encuadres utilizados, la mitad de la película está desencuadrada, con planos cortados, acción fuera de plano... pero es algo justificado (durante el transcurso te vas dando cuenta del motivo).
Visualmente, una maravilla. El anime moderno está alcanzando unas cotas artísticas muy altas, hay películas (esta podría ser perfectamente un ejemplo) en las que puede ocurrir que la historia no te llegue o no te guste nada, incluso puedes odiarla, pero las ves por lo bonitas que son. Esos paisajes, las escenas de lo cotidiano, los objetos y ropas, la multitud de detalles que dibujan y animan magistralmente, los propios personajes... una delicia para la vista.
En conclusión, si no te importa pasar un mal rato (igual hasta te apetece), y quieres probar formas narrativas alejadas de lo tradicional, esta película te va a encantar. Yo le doy un notable alto, sería un sobresaliente, como lo son Your Name o Suzume, si no fuera tan dura y tan cruel.
Comentarios
Publicar un comentario